Hasta acá hemos comprendido que la demanda por bienes depende, no solamente del precio, sino del ingreso de los consumidores y el precio de otros bienes. De la misma forma, la oferta de un bien depende del precio y del costo de los insumos de producción.
Por ejemplo, si el precio del café incrementa, la cantidad demandada caerá, y la cantidad ofrecida crecerá. Sin embargo, con frecuencia nos interesa conocer la magnitud de ese cambio
Para medir la sensibilidad de las cantidades demandas u ofrecidas, ante cambios en el precio (o ingreso) utilizamos las elasticidades.